Desde hace algunos años los hombres se preocupan cada vez más por su aspecto: cremas antiarrugas, antiojeras, productos para el pelo, dietas… Y, entre otras muchas más cosas, se interesan también por la depilación, especialmente en primavera y verano.
A la hora de elegir un método depilatorio hay que tener en cuenta no sólo el precio, sino también el tiempo que va a durar la ausencia de vello; muchos prefieren una sesión de láser cada dos meses, hasta conseguir eliminarlo por completo, que depilarse con cuchilla una vez a la semana. Además, dependiendo de qué zona se vaya a depilar, es mejor una opción u otra.
Los métodos más rápidos son los que menos duran. Por ejemplo, se puede depilar con cuchilla o con crema depilatoria en pocos minutos, pero como sólo se corta el vello, vuelve a aparecer muy pronto. Además, la crema depilatoria puede irritar la piel, en caso de tenerla muy sensible.
Por otro lado, el vello se puede arrancar de raíz con cera o con una máquina eléctrica; con lo que pasarán alrededor de dos semanas antes de que vuelva a crecer. La cera puede ser fría, tibia o caliente, siendo la caliente la más efectiva. En cuanto a las máquinas eléctricas, hay que tener en cuenta que no sirven para depilar todas las zonas del cuerpo.
Por último, está el método más duradero, la depilación láser, que consiste en un haz de luz que provoca la destrucción térmica de las células responsables del crecimiento del pelo y que tras varias sesiones elimina permanentemente el vello. Los hombres necesitan más sesiones de láser que las mujeres, pero normalmente con 8 sesiones es suficiente; aunque siempre depende del tipo de piel y de vello que se tenga, y, por supuesto, de la zona que se depile.
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