La calvicie es la pérdida gradual del pelo, puede producirse por enfermedades, herencia genética, quemaduras o por enfermedades de la piel.
Aunque hay tratamientos para frenar la caída, la cirugía capilar representa la mejor opción para lograr que el cabello vuelva a crecer en la forma afectada. En el proceso de la cirugía, se trasladan los folículos pilosos desde la nuca hasta la zona de la calvicie, para así efectuar el trasplante.
Hay que tener presente que no todas las personas son candidatas al implante capilar, para ello deben tener un cuadro de alopecia importante, aunque el médico hará los exámenes y según los resultados se podrá decidir si es necesaria la cirugía.